Tu sonrisa...
Palidece de súbito a las flores,
le quita los soles
que en sus pétalos se posan...
En tus crinejas, se trenzó el viento
y espantadas salieron las tristezas
que solían vivir en tus cabellos...
Tú sueñas con tus ojos
sentimientos frutales y cielos coloridos...
Retoza tu alma fresca
en los aromas nuevos; retoño feliz...
Niña ancestral, originaria,
Tu linaje embellece, hoy,
la sangre de las mezcolanzas
en las generaciones hijas de las conquistas;
y sigue fluyendo en los crisoles de las razas…
Tu génesis remota y autentica,
resplandece en tu etnia;
y me hace sentir fe y optimismo…
Quiero creer que tu sonrisa
elabora un futuro,
y se riega en la tierra
como una asertiva
y asentada esperanza, ahora...
Deseo con mis corazones
y mi etérea alma, que seas
una humana asida a tus raíces...
Y que prevalezca en tu presente
el milenario árbol de collares,
ritos, sabidurías y visiones
de tu imaginario antiguo y hermoso...
Que sigan tus pies, tus manos y mente
tu singular historia, raigambre y tejido
de los colores que te antecedieron...
Sin borrarse en tu adultez
la memoria de tu pueblo,
que palpitante siga en tus labios...
Eres un sueño de otros sueños,
que fueron cortados, pero renacieron…
Eras la dicha, la palabra secreta y viva
que despertó en la sonrisa
que te sonríe y tu sonríes
en la inocencia vivaz de tu cuerpo…
Tus labios remiten al encanto
de lo dulce, puro, genuino y cierto…
Ancestral niña, cosmos antiguo y nuevo…
ML
MARY RAMOS
DERECHOS RESERVADOS
IMAGEN: Colectivo GUIAS
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